
En realidad, su mundo es distinto del de los adultos, porque las posibilidades que le brinda la imaginación son mucho más creativas e inesperadas que las que ofrece la realidad de cada día. Pero aún queda un rasgo esencialmente característico del juego de nuestros hijos: su interés por todo lo que les rodea, que se refleja en el juego y que les impulsa a construir una realidad más "lógica", también les impulsa a invitarnos a compartirla con él.
¿Cómo jugar con ellos
Imaginen sen un momento esos niños que no tienen oportunidad alguna niños que no tienen una plaza ser ca , ni un campito para remontar un barrilete , si entre todos colaboramos vamos hacer algo positivo .
si queremos una coronda mejor empezemos desde nosotros mismos dejarnos de ambisiones que no llegan a nada.
Dioa nacio muy pobre en un pesebre , con animalitos , tenemos barrios con espacios donde podremos llegar a estos niños que son el futuro de mañana
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